Actualmente se ha hecho un hallazgo importante en cuanto a la influencia del ambiente con respecto al rendimiento escolar. Y es que un estudio en conjunto de integrantes de la Universidad de Harvard, junto con el Estado de Georgia y la UCLA, ha determinado cómo influye el calor en los exámenes.
Los alumnos siempre se han quejado que el calor no los deja estudiar, sin embargo, se ha demostrado que el aumento solamente de un 0,55° grados en la temperatura media del año, reduce 1% de la capacidad de aprendizaje de los estudiantes.
Se determinó de esta manera que las complicaciones con respecto al calor y el aprendizaje comienzan cuando la temperatura supera los 21° grados centígrados, se acentúa luego de los 32° para agravarse definitivamente luego de los 38°.
Es así como uno de los elementos que más subestiman las escuelas y profesores en todo el mundo, a demostrado ser de suma influencia para el desarrollo de un aprendizaje apropiado y un buen rendimiento académico.