Existen dos tipos de mantenimiento. Tenemos el mantenimiento correctivo, que es el que se encarga de, como dice su nombre, corregir cualquier falla que pueda tener un equipo cuando ésta se presenta. El mantenimiento correctivo está orientado a corregir una falla específica. El otro tipo de mantenimiento que existe es el preventivo. Éste, generalmente se realiza de manera periódica y tiene la finalidad de mantener las cosas en buen estado para evitar fallas mayores.
Si algo sucedió con nuestro aire acondicionado, lo mejor es contratar a un profesional que se encargue de la reparación del aire acondicionado Barcelona y no intentar hacerlo por sí mismo, ya que sin querer, se puede hacer un daño mayor. Esto mismo se aplica en el caso de la reparación de calderas.
Si bien no todos los aires acondicionados y calderas son iguales, ni trabajan bajo las mismas condiciones, en líneas generales lo mejor es realizarle mantenimiento preventivo cada seis meses. Esto hará que trabajen de manera idónea por el mayor tiempo posible.